Científicos descubren -gracias a ALMA- las huellas que dejan la formación de los planetas

Viernes, 14 Diciembre 2018

Laura Pérez, Académica
DAS-FCFM - Universidad de Chile

Viviana Guzmán, Académica
Instituto de Astrofísica - PUC

Nicolas Troncoso, Estudiante M. Sc.
DAS-FCFM - Universidad de Chile

En la investigación internacional participaron tres astrónomos chilenos, todos ellos miembros del Centro de Excelencia en Astrofísica y Tecnologías Afines CATA. El hallazgo analizó 20 estrellas en las regiones de formación estelar de Ofiuco y Lupus.

“Gracias a la espectacular resolución que nos entrega ALMA pudimos ver que las estrellas forman planetas en sus primeras fases de vida, rápidamente. Además gracias a los datos obtenidos pudimos ver con nitidez que dicho proceso deja huellas”, así lo explica Laura Pérez, astrónoma del Departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile.

La huella más común encontrada fueron “los anillos y en menor medida asimetrías y brazos espirales". En particular Pérez investigó un disco que “mostró que su parte más cercana a la estrella está des-alineada con respecto a la zona externa, algo que se esperaría ocurra solo en la presencia de un planeta enorme, algo así como 10 veces Júpiter”, explica la Doctora Pérez.

Otro de los resultados obtenidos lo explicó Nicolás Troncoso, estudiante de Magíster en Ciencias mención Astronomía FCFM de la Universidad de Chile“ Cuando las estrellas están naciendo, y los planetas se están formando alrededor de ellas, la interacción con compañeras binarias puede afectar fuertemente la forma en que nacen los planetas. Tuvimos la oportunidad de ver por primera vez dichas interacciones, y descubrimos que las estrellas se molestan entre ellas y sus discos protoplanetarios, produciéndose entonces un intercambio de material y espirales de las dimensiones de todo el Sistema Solar”, explica el joven científico.

El trabajo de muchos

Para lograr esta investigación se requirieron más de 65 horas de observación de ALMA, 17 astrónomos y el apoyo de 5 países, generando 10 publicaciones científicas distintos publicadas en una edición especial la revista científica Astrophysical Journal Letters.

“Desde que obtuvimos los datos trabajamos más de 6 meses calibrándolos, limpiando los efectos de la atmósfera, generando las imágenes de mayor calidad posible, para luego estudiarlas. Ocupamos modelos matemáticos, caracterizamos las estructuras que aparecen en los discos de estas estrellas jóvenes. La obtención de este tipo de información era crucial para comparar con simulaciones teóricas, y así entender qué procesos físicos están ocurriendo en los discos”, explica Troncoso.

Los científicos coinciden en que este hallazgo permite inferir que los planetas más grandes, con dimensiones y composiciones similares a las de Neptuno o Saturno, se forman rápido; de hecho, mucho más velozmente de lo que postulan las teorías actuales. También tienden a formarse en los confines de sus sistemas solares, muy lejos de su estrella huésped.

El siguiente paso

Para Viviana Guzmán, académica del Instituto de Astrofísica de Universidad Católica de Chile y autora de uno de los paper de esta investigación el próximo paso es “observar la componente gaseosa de estos discos protoplanetarios. Para eso tenemos un Large Program de 130 horas de observación, en él vamos a mapear la distribución de moléculas orgánicas (que contienen Carbono, Oxígeno y Nitrógeno), lo que nos permitirá estudiar en detalle las condiciones químicas iniciales de estos sistemas planetarios. La reducción de datos, análisis y escribir los papers debiera tomar unos 6 meses más.

Para más información sobre el descubrimiento revisar el comunicado original publicado por ALMA, hacienco click aquí.